Posts etiquetados ‘Victoria Gullón’

Estoy en Medellín, en el 12° Festival Internacional de Cuentería «Entre cuentos y flores» de Vivapalabra. Un Festival muy especial por las fechas en las que se realiza (las de la Feria de las Flores) y por el maravilloso trato que la organización nos dispensa. Jota, Luz Marina y todo el equipo son unos anfitriones impecables. He disfrutado de los espléndidos trabajos de Ramsés Moctezuma, Paula Carballeira, Carolina Rueda… pero de quien necesito hablar es de Victoria Gullón. Ayer fue su función en sala. Como todos, como todas, se sentía responsable con el público de esta ciudad, que es generoso y expansivo, eso significa nervios. Ella nos lo comentó al final. Estaba muy nerviosa. Pero eso no fue lo que vimos. Lo que vimos fue otra cosa.

Victoria presentó «De pura cepa». Un espectáculo en el que, como en todos los suyos, canta romances, cuenta historias. La tradición oral, de su mano, ni es nostalgia ni un ejercicio de recuperación de algo perdido ni folklor. Con ella, eso que parece perdido se vuelve presente, pertinente, nos habla. Victoria pone en juego un mundo al que de una manera extraña, la manera de Victoria, es posible pertenecer. Pero hay más. En estos días he estado leyendo ¿Qué hago yo aquí? de Bruce Chatwin. En la semblanza que Chatwin hace del compositor sudafricano Kevin Volans y de su música encontré el modo como a mí me gustaría que, algún día, se pudiera hablar de lo que hago. Y ayer, después de ver «De pura cepa», supe que las palabras que tanto me gustaban eran para Victoria: «No tenía que ver con nada ni con nadie. Simplemente estaba allí. Era libre y viva.» Así es ella. No tiene que ver con nada ni con nadie, su trabajo es único. Sobre el escenario hay una mujer que canta y cuenta, que está con nosotros, que está ahí, libre y viva. Victoria habla o canta sus romances y el escenario se puebla de imágenes, de sensaciones, de gente, de vida. Lo remoto se vuelve cercano, lo ajeno, propio. Y una sabe que lo que sucede es una experiencia única que ha tenido la suerte de vivir. Por eso he necesitado escribir estas líneas.